Uno no ofende a Dios solo al robar, blasfemar, o desear la mujer del prójimo, sino también cuando uno daña el medio ambiente, participa en experimentos científicos dudosos y manipulación genética, acumula excesivas riquezas, consume o trafica drogas y ocasiona pobreza, injusticia y desigualdad social, dijo Monseñor Girotti.
Pues la limpieza tendría que empezar desde dentro, cuando apoyo los experimentos genéticos de la Alemania Nazi, su acumulación de riquezas, siendo Jesús pobre, eso también debe ser pecado.
También el apoyar la deforestación del amazonas para emplazar centros de misioneros para combertir a los impuros, debe de ser pecado.
He de recordar que las drogas como el Opio y otras derivaciones, fueron utilizadas por la iglesia a modo de incienso, para cautivar en la Edad Media a los creyentes y hacerles olvidar sus creencias anteriores, provocando grandes diferencias sociales entre paganos y cristianos.
El año pasado, el actual papa Benedicto XVI dijo que el infierno existe, pues añado lleno de curas y gente de la Iglesia.
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